Cátedra de Clínica Médica – Facultad de Ciencias Médicas – Universidad Nacional de Rosario

Reflexiones sobre la implementación de autopsias en la actualidad
 

La frecuencia con la que se solicita al médico patólogo un  examen postmortem (autopsia o necropsia) ha caído considerablemente, exceptuando, claro está a la autopsia de causa medico legal.
 

Particularmente he conocido la época en la que en el Hospital Centenario, se practicaban aproximadamente 300 necropsias por año. En ese entonces el Hospital dependía de la Universidad ¿habrá tenido algo que ver esto con el hecho de que se efectuaran menos autopsias desde que pasó a jurisdicción provincial?. Seguramente el asunto es multifactorial; existen por ejemplo problemas de infraestructura, de recursos humanos, jurídicos y legales que ocasionaron durante muchos años que no se hicieran autopsias en nuestro hospital. Obviamente todas estas razones hicieron que muchas generaciones de médicos residentes y médicos de planta no hayan conocido “la época de las autopsias”. No voy a enumerar las razones por las cuales es útil el examen postmortem. Simplemente pienso en un residente de anatomía patológica que no haya visto una necropsia o un residente de cualquier otra especialidad que no pueda contar con este recurso de aprendizaje. La pérdida del hábito de realizar una necropsia implica toda una estrategia de “readquisición” de este hábito como instrumento destinado a aprender. Cuando me refiero a aprender quiero decir las destrezas y habilidades del  patólogo para su realización y el conocimiento de la patología subyacente y la causa de muerte para el médico que atendió en vida al paciente. Lo que creo muy importante es que se sepa es que, de acuerdo a estudios como el que se resume en esta página se recomienda aun el uso de la autopsia. No soy ingenuo y sé que sigue habiendo obstáculos (culturales, legales, de infraestructura etc) que conspiran contra una normal práctica del examen postmortem.
 

Volvamos al hecho de que el Hospital dependía de la Universidad. Se supone que un Hospital universitario debe reunir la excelencia académica y la realización de autopsias frecuentemente colabora para que la excelencia académica se mantenga vigente. Cuando el Hospital pasa al ámbito de la Provincia de Santa Fe, se privilegia el aspecto asistencial (por otra parte es lógico que así sea). La autopsia no es un recurso asistencial, no está “nomenclado”, da solamente “pérdidas económicas” y no se le puede facturar a ninguna obra social. Desde esta visión puramente asistencialista de la salud pública es probable que la autopsia sea relegada como un procedimiento que implica mucho esfuerzo para todos lo que intervienen en su trámite y ejecución. Recordemos, de todos modos que la realización de necropsias es una herramienta que mide calidad en la prestación de recursos de salud.  La Universidad tiene como objetivo básico la investigación. Bajo este marco teórico parecería que efectuar autopsias tuviera una explicación mas lógica.
 

Es un desafio para todos, autoridades provinciales y universitarias y médicos involucrados en la atención de pacientes. Es importante destacar que en los últimos años, en nuestro hospital, hemos reiniciado esta práctica, lo cual ha permitido la realización de 3 seminarios anátomo-clínicos en el año 2003, 3 en el año 2004 y 4 en lo que va del año 2005, con lo que esto significa como aporte a la formación médica de posgrado. Alguien dijo que a los pacientes hay que estudiarlos en vida y posiblemente también después que ésta haya finalizado.